

Durante la pandemia millones de personas tuvieron que reinventarse para generar ingresos. Mientras el mundo estaba paralizado por la cuarentena, en una casa en medio del campo bonaerense un proyecto familiar empezó a ponerse en movimiento.
Los Green, en Pehuajó, desde el 2015 ya criaban ovejas en su campo y en pleno encierro, se pusieron a investigar de qué modo podían agregar valor en un mercado afectado por la incertidumbre.
Durante la pandemia millones de personas tuvieron que reinventarse para generar ingresos. Mientras el mundo estaba paralizado por la cuarentena, en una casa en medio del campo bonaerense un proyecto familiar empezó a ponerse en movimiento.
Además de helados, la familia Green hace quesos y dulces con leche ovina (Foto: instagram/familia.green).
Fue así que descubrieron un producto que ya se comercializaba en Europa, pero que en la Argentina no estaba explotado y confiaron en que podía ser bien recibido por los bolsillos y los paladares del público.
La dedicación, mucho esfuerzo y el trabajo en equipo dieron finalmente un resultado: la creación de helados hechos a base de leche de ovejas Pampinta.
Del campo a la Ciudad: así se gestó la idea de un local en Recoleta (Foto: instagram/familia.green).
“Empezamos haciendo quesos y dulce leche. Fuimos aprendiendo y creciendo porque no sabíamos nada, y fue muy buena experiencia”, relató el productor Leslie Green, en diálogo con TN Campo.
Contó que “descubrieron por Internet” que el helado con leche de oveja ya se hacía en algunos países de Europa, en Nueva Zelanda y en Chile; y que acá “solo había una heladería en El Bolsón”.
"La leche de oveja es más liviana que la de vaca", aseguró Leslie Green en TN Campo.
“La mayor virtud es que la leche de oveja no produce alergia por el tipo de grasa que tiene, y es de fácil digestión”, explicó el pehuajense que ofrece en el mercado más de 20 gustos de helado.
Leslie destacó que todos los integrantes de la familia forman parte del equipo de trabajo y eso los enorgullece. “Como padres es muy lindo poder ir compartiendo con nuestros hijos todo lo que se proyecta, lo que se va logrando, y por supuesto inculcar el ejemplo del trabajo y responsabilidad”, dijo.
Como trabajador del agro, también reconoció que “el hecho de dar valor agregado genera satisfacción”, porque conoce toda la “trazabilidad de la materia prima”. “Sabemos todo lo que pasa hasta tener el helado que llega al consumidor, desde un pequeño emprendimiento se generan muchas oportunidades“, afirmó.
Uno de los hijos de Leslie atiende al público en el local (Foto: instagram/familia.green).
A pesar de las complicaciones y los obstáculos que implica abrir un comercio y producir en el país, en diálogo con TN Campo, Leslie Green concluyó: “Emprender está buenísimo, hay que pasar las etapas de todo proyecto, las buenas, las difíciles pero no hay que aflojar. Hay un potencial en todo, así que solo hay que animarse y permanecer en el tiempo hasta lograr el resultado final”.
La Pampinta es una raza ovina sintética argentina, creada en la Estación Experimental Agropecuaria INTA Anguil, La Pampa, durante la década del 70. Es conocida por su triple propósito: carne, leche y lana.
La raza Pampinta fue creada en Anguil, La Pampa (Foto: facebook/Asociacion Argentina de Criadores de Pampinta).